No podía dejar pasar el recordar a Alberto Bayo Giraud a 40 años de su muerte. Mientras en Comitán trabajo por crear un Centro muy especial de Ajedrez para estudiantes de diversas entidades del país y del sur de los Estados Unidos que se planea inaugurar el 1 de octubre de 2007, en una experiencia única en su genero; atiborrado de libros que esperan ser desempacados tras semana y media de permanecer mezclados con computadoras y piezas de ajedrez que se desparraman entre guayaberas cubanas y hamacas yucatecas, tuve que revisar toda la metodología con que se promueve el ajedrez en diversos países.
Anteayer, tomando “Café Mam” con el escenario de la hermosa iglesia de San Sebastián, pensé que un día 4 de agosto había muerto el principal iniciador de la promoción del ajedrez en Cuba, que no era un argentino, como muchos piensan. No, no fue el “Che” Guevara. Para mi, el verdadero iniciador fue un cubano, de nacionalidad española y luego mexicano y posteriormente cubanizado. Nacido de padre español y madre nacida en Cuba, el 22 de marzo de 1892, en Camaguey, cuando Cuba era aún provincia real de España, que no colonia, Alberto Bayo se graduó de piloto de avión en Estados Unidos y en Madrid, España; luego fue teniente coronel del ejército español republicano y el ejecutor de uno de las operaciones más audaces de la Guerra Civil Española, el 16 de agosto de 1936. Una operación anfibia que luego sería estudiada en las academias militares más prestigiosas del mundo. Tras perder la guerra el ejército republicano, el “Capitán” como le decían en su calidad de piloto de guerra, viajó a México y residió primero aquí en Comitán, Chiapas; para luego ser un comerciante de muebles exitoso. En 1955 o 1956 conoce a Fidel Castro y a Ernesto “Che” Guevara, quienes entusiasman con sus ideas a este español nacido en Cuba ya casi anciano, tuerto después de una batalla en Melilla 30 años antes, y lo hacen convertirse en su entrenador para la guerrilla. Sus 150 reglas para el guerrillero, de lo que aprendió de los moros guerrilleros a los que tuvo que combatir, se vuelven un manual de uso común en Sierra Maestra y entra con Fidel, con 67 años a cuestas, a La Habana en 1959.
Ajedrecista entusiasta como el “·Che”, el comandante Bayo, ya general del ejército cubano, está detrás de la organización del movimiento del ajedrez en Cuba. Supervisa manuales, preparación de instructores, programas de preparación y estructura toda la organización de la Federación Cubana de Ajedrez que finalmente dirigiría José Luis Barreras, pero con el apoyo de Bayo y el “Che”.
Ya en 1966, con la Olimpíada de Ajedrez de La Habana por celebrarse, la salud le falla a este gran aventurero de 74 años, participante de combates en Africa, España y Cuba; disfruta poco el evento y comienza una larga temporada de molestias que finalmente, un 4 de agosto, como hoy, pero de 1967 lo lleva a la muerte. Sólo dos meses antes que su gran amigo, alumno y compañero de ajedrez, Ernesto “Che” Guevara.
Dice Miguel Medina, conocedor de la historia de Comitán, que el viernes próximo podrá llevarme a una casita de un poblado cercano donde vivió Alberto Bayo y que tiene un vecino una carta donde Bayo le contaba que el ajedrez con que se jugaba en la Sierra Maestra era francés, pero comprado en Comitán, pero que una torre que se le había perdido si era 100% chiapaneca. La madera tan valiosa de Chiapas convenció a Bayo que los muebles de aquí eran los mejores y por ello regresó continuamente a Comitán para llevar muebles a la Ciudad de México.
No se que sería de la mueblería de Bayo. Dicen que todo lo abandono para ir a hacer la revolución en Cuba…
El Centro que se está instalando aquí será básicamente patrocinado por una Fundación México-Norteamericana y se que no les interesa la historia de Bayo en Comitán. En el Granma Internacional de hoy no aparece ninguna mención sobre la muerte de Bayo el 4 de agosto de 1967 y quién sabe si los ajedrecistas cubanos jóvenes lo tengan presente. En realidad yo he aprendido más en Comitán sobre él que en algún viaje a Cuba.
A 82 kilómetros de aquí, en la Ciudad Real, San Cristóbal de las Casas, cerca del Café La Selva, vive un anciano español que dice que peleó al lado de Bayo. Lo conocí hace unos seis años cuando trabajé aquí. Hace una semana, ya más intrigado por su historia y no pareciéndome tan viejo, le pregunté en que batalla de la guerra civil española había estado con Bayo. La respuesta era natural: “Yo era un niño en esa época, no señor, yo estuve al lado de Bayo en Cuba, ¡esa guerra si la ganó!, pero luego perdió en tiempos de paz y en 1972, ya no me gustó la cosa y al no querer regresar a España me vine a San Cristóbal y tengo un hotelito que me da para vivir. Llegan los muchachos con sus playeras del Che Guevara y les bromeo: yo jugaba ajedrez con él y con su maestro, ganándoles siempre. Lo cierto es que no juega mal,.pero ya me confesó que el “Che” siempre lo venció. Pero eso si, hizo tablas con Letelier, campeón de Chile, en una simultaneas en 1966.
¿Qué se puede decir de Bayo? Su vida era como de aventuras de novela y paso sus últimos años jugando ajedrez nada más. Pero su movimiento de ajedrez fue algo único, pues en toda Cuba se jugaba ajedrez.
Comitán, Chiapas; a 4 de agosto de 2007.
40 años de la muerte de Alberto Bayo Giraud.
Anteayer, tomando “Café Mam” con el escenario de la hermosa iglesia de San Sebastián, pensé que un día 4 de agosto había muerto el principal iniciador de la promoción del ajedrez en Cuba, que no era un argentino, como muchos piensan. No, no fue el “Che” Guevara. Para mi, el verdadero iniciador fue un cubano, de nacionalidad española y luego mexicano y posteriormente cubanizado. Nacido de padre español y madre nacida en Cuba, el 22 de marzo de 1892, en Camaguey, cuando Cuba era aún provincia real de España, que no colonia, Alberto Bayo se graduó de piloto de avión en Estados Unidos y en Madrid, España; luego fue teniente coronel del ejército español republicano y el ejecutor de uno de las operaciones más audaces de la Guerra Civil Española, el 16 de agosto de 1936. Una operación anfibia que luego sería estudiada en las academias militares más prestigiosas del mundo. Tras perder la guerra el ejército republicano, el “Capitán” como le decían en su calidad de piloto de guerra, viajó a México y residió primero aquí en Comitán, Chiapas; para luego ser un comerciante de muebles exitoso. En 1955 o 1956 conoce a Fidel Castro y a Ernesto “Che” Guevara, quienes entusiasman con sus ideas a este español nacido en Cuba ya casi anciano, tuerto después de una batalla en Melilla 30 años antes, y lo hacen convertirse en su entrenador para la guerrilla. Sus 150 reglas para el guerrillero, de lo que aprendió de los moros guerrilleros a los que tuvo que combatir, se vuelven un manual de uso común en Sierra Maestra y entra con Fidel, con 67 años a cuestas, a La Habana en 1959.
Ajedrecista entusiasta como el “·Che”, el comandante Bayo, ya general del ejército cubano, está detrás de la organización del movimiento del ajedrez en Cuba. Supervisa manuales, preparación de instructores, programas de preparación y estructura toda la organización de la Federación Cubana de Ajedrez que finalmente dirigiría José Luis Barreras, pero con el apoyo de Bayo y el “Che”.
Ya en 1966, con la Olimpíada de Ajedrez de La Habana por celebrarse, la salud le falla a este gran aventurero de 74 años, participante de combates en Africa, España y Cuba; disfruta poco el evento y comienza una larga temporada de molestias que finalmente, un 4 de agosto, como hoy, pero de 1967 lo lleva a la muerte. Sólo dos meses antes que su gran amigo, alumno y compañero de ajedrez, Ernesto “Che” Guevara.
Dice Miguel Medina, conocedor de la historia de Comitán, que el viernes próximo podrá llevarme a una casita de un poblado cercano donde vivió Alberto Bayo y que tiene un vecino una carta donde Bayo le contaba que el ajedrez con que se jugaba en la Sierra Maestra era francés, pero comprado en Comitán, pero que una torre que se le había perdido si era 100% chiapaneca. La madera tan valiosa de Chiapas convenció a Bayo que los muebles de aquí eran los mejores y por ello regresó continuamente a Comitán para llevar muebles a la Ciudad de México.
No se que sería de la mueblería de Bayo. Dicen que todo lo abandono para ir a hacer la revolución en Cuba…
El Centro que se está instalando aquí será básicamente patrocinado por una Fundación México-Norteamericana y se que no les interesa la historia de Bayo en Comitán. En el Granma Internacional de hoy no aparece ninguna mención sobre la muerte de Bayo el 4 de agosto de 1967 y quién sabe si los ajedrecistas cubanos jóvenes lo tengan presente. En realidad yo he aprendido más en Comitán sobre él que en algún viaje a Cuba.
A 82 kilómetros de aquí, en la Ciudad Real, San Cristóbal de las Casas, cerca del Café La Selva, vive un anciano español que dice que peleó al lado de Bayo. Lo conocí hace unos seis años cuando trabajé aquí. Hace una semana, ya más intrigado por su historia y no pareciéndome tan viejo, le pregunté en que batalla de la guerra civil española había estado con Bayo. La respuesta era natural: “Yo era un niño en esa época, no señor, yo estuve al lado de Bayo en Cuba, ¡esa guerra si la ganó!, pero luego perdió en tiempos de paz y en 1972, ya no me gustó la cosa y al no querer regresar a España me vine a San Cristóbal y tengo un hotelito que me da para vivir. Llegan los muchachos con sus playeras del Che Guevara y les bromeo: yo jugaba ajedrez con él y con su maestro, ganándoles siempre. Lo cierto es que no juega mal,.pero ya me confesó que el “Che” siempre lo venció. Pero eso si, hizo tablas con Letelier, campeón de Chile, en una simultaneas en 1966.
¿Qué se puede decir de Bayo? Su vida era como de aventuras de novela y paso sus últimos años jugando ajedrez nada más. Pero su movimiento de ajedrez fue algo único, pues en toda Cuba se jugaba ajedrez.
Comitán, Chiapas; a 4 de agosto de 2007.
40 años de la muerte de Alberto Bayo Giraud.