Una tarde el profr. Salvador Sanvicente García me pidió dijera unas palabras de aliento a un niño que había perdido una partida. No acerté en ese momento más que decirle:
“Cualquiera puede tener una buena partida, la pregunta es que hacer cuando uno ha tenido una mala partida .La victoria muestra hasta donde puedes llegar Una derrota muestra lo que vales, tu esencia interior, mejor que un buena partida”
El caso es que cuando estoy frente a un niño me envuelven dos sentimientos: ternura por lo que son y respeto por lo que pueden llegar a ser.