20 mar 2018

CUARENTA AÑOS DE LA SIEMBRA FISICA DEL GM CARLOS TORRE REPETTO.



Para muchos jóvenes ajedrecistas el nombre del GM Carlos Torre Repetto solo se asocia con el Torneo Internacional que en su memoria se realiza año con año en su natal Mérida, en que participan muchos jugadores en diversas categorías.
En una época el Torneo fue parte importante para la promoción del ajedrez en la región, pero ha tenido altibajos y en su sección principal es baja la participación de los mejores jugadores mexicanos y ya sea por la cercanía, o por las facilidades especiales, un gran porcentaje de los jugadores titulados participantes provienen de Cuba y es escasa la participación de jugadores titulados mexicanos dadas las distancias desde la zona central o norte del país, donde se hallan los principales núcleos del ajedrez mexicano.
La familia del GM Carlos Torre Repetto emigró desde que él era niño a los Estados Unidos debido a la posición importante que su padre, Egidio Torre, tuvo en el gobierno de Madero, huyendo del golpe traicionero de Huerta. Formado ajedrecísticamente en los Estados Unidos, pero gracias a la influencia de su padre y hermanos, todos de destacada preparación cultural y capacidad intelectual, fue avanzando a grandes pasos en el ajedrez, colocándose con Marshall y el gran Capablanca, en el máximo nivel del ajedrez en América antes de cumplir los veinte años de edad.
Sus excelentes estudios académicos influyeron en mucho en su ajedrez, sus hábitos de estudio, su formación epistemológica, la benéfica influencia de sus profesores, docentes de una de las instituciones líder en la educación del sur de los Estados Unidos, en una época en que la ciudad de Nueva Orleans, donde residía Torre, era considerada una meca del conocimiento y el comercio de todo el coloso del norte, posibilitaron a que Torre desarrollase un sistema propio de juego, aunque basado en los grandes pensadores del ajedrez de su época como James Mason, Harry Nelson Pillsbury; así como Emanuel Lasker y posteriormente José Raúl Capablanca.

Los muchos artículos y partidas que comentó Torre y que fueron publicados durante su labor como colaborador de la revista “The American Chess Bulletin”, cuando se trasladó en Nueva York, culminaron en un refinamiento de sus métodos de análisis y en el desarrollo de una serie de algoritmos para resolver todo tipo de posiciones en el ajedrez, por lo que con esas herramientas subió a las más altas cumbres del ajedrez y en 1925, la más prestigiosa revista europea en ese entonces, The British Chess Magazine, lo calificó en el quinto lugar del escalafón mundial.
Pude tratar a Torre en los últimos seis años de su vida, cuando se realizó el Campeonato Centroamericano y del Caribe realizado en México en 1972, cuando jugaba yo el primer tablero del equipo de México y tenía 19 años de edad y la imprudencia de mi edad y acosaba con preguntas al GM Torre, aprovechándome de que estaba enterado del cariño que el maestro profeso a mi abuelo materno. Torre, siempre paciente y con gran lucidez contestaba todo y eran conferencias invaluables para todos los que escuchábamos sus respuestas. Posteriormente lo visitamos en Mérida el futuro GM Marcel Sisniega y yo, gracias a la hospitalidad del nunca demasiado recordado Carlos Manzur Simón, sucesor en la promoción del ajedrez en Yucatán del Maestro Manuel Vega López de Llergo, Fundador de la FENAMAC y motor durante décadas del ajedrez en la tierra natal de Torre.
El caso es que al menos una decena de jugadores pudimos conocer partidas del maestro con sus propios comentarios, además de que reunimos la bibliografía publicada en varios medios sobre la creación ajedrecística del gran jugador formado en Nueva Orleans de cepa yucateca. Para 1976 escribí un pequeño cuaderno sobre el gran maestro y ya para 2016 pude ver un libro completo y muy bien ilustrado que escribí con sus partidas y metodología.
Han pasado 40 años de su siembra física y he tratado en mis cursos enseñar a los jugadores de la nueva generación algunos de los métodos de Torre y mezclando ejemplos de sus partidas con los modelos de la escuela soviética y de los grandes campeones mundiales Lasker, Capablanca y Fischer, ya he desarrollado cursos completos en que en cada tema, en cada herramienta hay mucho de las creaciones del GM Torre y los maestros y escuela mencionada.
Así como hay un libro de texto en que los aspectos mas importantes del conocimiento ajedrecístico se ejemplifican con partidas de Keres y que su autor Yakov Neishtadt titulo “Universidad Ajedrecística Paul Keres”, siempre he deseado hacer algo similar con las partidas de Torre y titularlo “Universidad Ajedrecística Carlos Torre”. De hecho mis cursos podría denominarlos así, aunque siempre hay mucho de Capablanca, Fischer y Lasker, además de todos los gurús soviéticos, sobre todo los entrenadores de Riga.