En 2011 se celebran muchos aniversarios, como los del primer hombre en el espacio, que antes de la “glasnot” era dado por seguro que fue Yuri Gagarin, aunque tras algunos documentos clasificados presentan a Illushin, el diseñador de aviones, como un posible primer cosmonauta, aunque no tan carismático como Gagarin y parece que tuvo un aterrizaje accidentado y su vuelo no fue tan bueno como el de Gagarin y prefirieron los soviéticos no contarlo como primer hombre en el espacio y así Illushin pasa a la historia como el gran creador de aviones y no como primer hombre en el espacio. Es difícil decirlo, porque el pasado de la URSS cambia todos los días conforme aparecen documentos “clasificados” que con la desaparición de la Unión Soviética dejaron de guardarse.
En 1931, hace 80 años, según unos de esos documentos que fueron escaneados en Uzbekistan y que de alguna manera pasaron a Internet , como el Wilkileaks, parece que el diseñador de los métodos de estudio que se aplicaban al ajedrez en la URSS no fue Vigotsky, sino otro personaje de la famosa Tríada de psicólogos soviéticos, Luria. Vigotsky, Luria y Leontiev tuvieron una influencia determinante en la manera de enseñar y estudiar en la URSS, y aunque en un principio recibieron buen apoyo gubernamental, poco a poco cayeron de la gracia de Stalin y en una corriente de antisemitismo, ya que los tres eran de origen judío, fueron poco a poco disminuídos en su poder. Incluso el líder, Lev Semionovich Vigotsky fue dado como muerto en 1934, de tuberculosis, pero aun eso esta hoy en duda. El caso es que muchos pensaban que Vigotsky marcaba las pautas de cómo enseñar y entrenar ajedrez en la URSS, claro que con apoyo de ajedrecistas profesionales como Rabinovich, Romanovsky, Riumin y Levenfish, pero situando las bases “psicológicas” de la enseñanza del ajedrez. Pero los mencionados documentos de Uzbekistan hacen ver que Luria era realmente el autor. Luria vivió hasta 1977, y tuvo grandes altibajos en su prestigio y reconocimiento como psicólogo. En lo que toca al ajedrez, solo unos cuantos entrenadores alguna vez lo mencionaron, con excepción de Makogonov, un gran maestro de gran influencia para la creación de la escuela de Baku, de donde eventualmente surgió Kasparov. Precisamente uno de los descendientes de Makogonov fue el que rescató los apuntes de Luria, que totalizan más de 1000 cuartillas y que, datados en 1931, parecen describir todo los métodos que se experimentaron en la enseñanza del ajedrez entre esa fecha de 1931 a 1992, cuando desaparece la URSS. Salvo en revistas como “Ajedrez en la URSS” de los años 1960 y 1961, poco se reconoce a Makogonov como fundamental en el sistema de enseñanza del ajedrez en la URSS y a Luria se le menciona sólo como miembro de la famosa tríada de Vigotsky, Leontiev y Luria, `pero no se menciona que era la base del sistema. Luria incluso llegó a estar desempleado poco antes de morir Stalin y solo logra trabajo colaborando con Boris Weinstein y Olga Tijomirova, dirigentes del ajedrez en la URSS. De hecho, según parece, la primera poseedora de los apuntes ahora difundidos fue Tijomirova, que durante cuatro décadas fue como la regidora del sistema de enseñanza de ajedrez de la URSS, aunque no hay en Occidente muchas referencias del enorme papel que jugó en el ajedrez de la URSS. Weinstein, por otra parte, fue colaborador y corrector de los textos del famoso libro de Bronstein sobre el torneo de candidatos de Zurich 1953 y autor de una biografía sobre Bronstein y reconocido como escritor. Asimismo mantuvo puestos importantes en el gobierno de la URSS durante los momentos más antisemitas del régimen de Stalin, a pesar de su notorio origen judío. El caso es que es fascinante leer los apuntes de Luria sobre la psicología en ajedrez y llama la atención que hayan pasado 80 años, desde 1931, para que se conocieran, y me temo que no por muchos.