Decían los economistas que tomando en cuenta todos los factores de geopolítica no se explicaba porque le iba tan mal a la Argentina en Economía y tan bien a Japón. Un entrenador de Moldavia, que ha estudiado mucho el ajedrez iberoamericano y que ha analizado lo que se gasta en dinero gubernamental en ajedrez en cada país me preguntaba: “¿Por qué le va tan mal a México en ajedrez y tan bien al Perú?” Me recordaba una pregunta similar que se hizo Felipe II sobre los virreinatos de Nueva España y Perú, aunque en sentido opuesto, pues las luchas entre españoles en el Perú duraron más décadas que en Nueva España. Se dice que de ahí viene la frase: “¡Averígüelo Vargas!”