7 oct 2013

El Ajedrez, el Che y las Universidades mexicanas.




Este 8 de octubre por todo nuestra América se realizan actividades para recordar al Che. Su hija, la Dra. Aleida Guevara March es solicitada como conferencista en foros internacionales continuamente, incluyendo eventos de ajedrez en honor del Dr. Ernesto “Che” Guevara de la Serna. 

En el ajedrez el Che jugó un papel fundamental para su promoción en Cuba y esto fue debido a una faceta que las nuevas generaciones a menudo pasan por alto, deslumbradas, quizás, por la enorme imagen del Che como guerrillero.
Pero para la apreciación y valorización de la cultura el Che desempeño un papel muy importante en la forma de pensar del hombre del siglo XXI en general y de los jóvenes cubanos en particular.

Recientemente, en la Feria del Libro en la Universidad de Chapingo, dedicada a Cuba, expuse algunas de las razones del porqué el Che es importante para el ajedrez y para la posición del ajedrez en las universidades mexicanas.


Dos de mis escritores cubanos favoritos son el Dr. Armando Hart y el Dr. Fernando Martínez Heredia. El primero ha escrito ampliamente sobre el papel del Che como referente del pensador revolucionario y requiere ser citado continuamente cuando se habla del Che como guía intelectual. Fernando Martínez Heredia en uno de sus primeros ensayos: “El ejercicio de pensar” apunta que cuando la teoría no sirve a la práctica, no significa que la teoría sea inútil, sino que no hay teoría bastante; es necesaria más (y mejor) teoría que resulte útil. Es necesario pensar y de hacerlo teóricamente, y conectar esa reflexión con el ámbito de la formación del sentido común y de la toma de decisiones a nivel individual. En su excelente libro: “El Che Guevara: los sesenta y los noventa”, En el horno de los 90, Ediciones Barabarroja, Buenos Aires 1999, se puede comprender la revolución y es un documento hacia el futuro. En su libro, Martínez Heredia cita una de las frases más sentidas de Martí y que el Che mostró, como debiéramos todos, sentirla ampliamente: “Patria es humanidad”. Los latinoamericanos tenemos que luchar, nos dice Martínez Heredia, por realizar un destino común, en el cual reside nuestra oportunidad, y que la liberación es una falsedad si no tiene como protagonistas y beneficiarios a las grandes mayorías. Para cada individuo, apunta finalmente, sin embrago, las formulaciones generales se encarnan en los ámbitos de sus vivencias.
Martínez Heredia dice del Che: El héroe de la guerra, el dirigente, alcanzó su estatura mayúscula porque logró estar a la altura teórica y práctica planteada por un conjunto de retos tremendos. Es el hombre de los “como”, dice Martínez Heredia, y no solo de las grandes palabras. El ser humano que enlaza las grandes frases con las tareas más concretas, y relaciona las mediaciones de las tareas revolucionarias con los principios generales que deben regirlas.
El Che habló del ajedrez como de un valor de enorme importancia subjetiva y ahora en las universidades mexicanas existe la enorme oportunidad de que el ajedrez tenga un reconocimiento adecuado, por fin…
¿Cómo? En la plática en la Universidad de Chapingo sobre Cuba y el ajedrez toque un tema muy importante para mi, como profesor de educación superior: El Nuevo panorama de las actividades extracurriculares en la Educación Superior, la oportunidad para el estudiante mexicano.
Afortunadamente para los estudiantes mexicanos, la educación superior de México se está viendo forzada, por acuerdos internacionales que la obligan, a dar un salto de calidad enorme en beneficios de los estudiantes mexicanos y de los nuevos profesionales del siglo XXI.
Se realizaron importantes acuerdos de Universidades e Instituciones de Educación Superior  de  México en 2007 y que debieran cumplirse a partir de enero de 2012. Comprometidas a cumplirlos tras un plazo de 5 años que se terminó en enero de 2012, están como sorprendidas por el hecho y han caído en un rezago en su cumplimiento.
Veamos los antecedentes de esto, con ideas apuntadas en los escritos del Dr. Armando Hart:
Las mujeres y los hombres que tenemos preocupaciones sociales y culturales estamos en la obligación de apuntar  y subrayar algunos hechos históricos de vieja trascendencia y de los cuales no se han extraído todas las consecuencias posibles. La modernidad que deseamos para el siglo XXI tiene necesariamente que tomar en cuenta la historia y la prehistoria del ser humano y algunos de sus rasgos distintivos. la civilización esclavista de los romanos y el sistema colonial europeo  no hubiera perdurado cerca de mil años la primera y más de medio milenio el segundo, sin sentido práctico y la impresionante y portentosa cultura jurídica fincados en una extraordinaria producción intelectual. El ascenso del capitalismo europeo no se concibe sin la exaltación de la cultura clásica antigua y su renovación, sin el Renacimiento.
Los procesos revolucionarios, la Revolución francesa, son impensables sin los enciclopedistas. Asimismo las ideas socialistas de los siglos XIX y XX no hubieran existido sin la cultura universal acumulada.
De esa misma manera el movimiento revolucionario independentista de los pueblos de la América Nuestra se impuso sobre el dominio colonial ibérico porque fue receptivo a las tradiciones culturales y políticas más elevadas de la humanidad de su tiempo.
Hart nos dice:
La importancia del factor subjetivo:
“El defecto fundamental de todo el materialismo anterior, incluido Feuerbach, es que solo concibe las cosas, la realidad, la sensoriedad, bajo la forma de objeto o de contemplación, pero no como actividad  sensorial humana, no como práctica, no de un modo subjetivo. De aquí que el lado activo fuese desarrollado por el idealismo, por oposición al materialismo, pero sólo de un modo abstracto, ya que el idealismo, naturalmente, no conoce la actividad real, sensorial, como tal. Feuerbach quiere objetos sensoriales, realmente distintos de los objetos conceptuales, pero tampoco él concibe la propia actividad humana como una actividad objetiva”
Es decir, el factor subjetivo se manifiesta a través de la práctica; y la práctica es la prueba definitiva de la verdad, dijo Lenin.
En el papel central que desempeñan los factores éticos y morales en la historia y en la búsqueda que se emprendió por un pensador tan grande como fue el Dr. Ernesto Guevara con respecto a los caminos eficaces hacia la sociedad socialista, están las claves esenciales para entender los dramáticos procesos ocurridos en Europa del Este y en la URSS.
La insuficiencia o limitación cultural, y especialmente ética, impidieron al llamado socialismo real cohesionar a los pueblos en lo interno y combatir eficazmente en lo externo a los enemigos irreconciliables de la liberación humana.
El Dr. Guevara fue el primero que habló de la necesidad de forjar al ser humano del siglo XXI, hoy nos percatamos que arribamos a este siglo en medio de la más profunda crisis humanística de la historia de la civilización occidental.
La evolución posterior de la historia nos puede conducir a mediano y a largo plazo a un colapso de proporciones incalculables si no se toma conciencia y no se actúa sobre presupuestos de una cultura ética profundamente humanista.
El reto intelectual se plantea en demostrar, con una síntesis de cultura universal, el valor científico de la moral y de los móviles ideales en el curso real de la historia humana.
como señalaba Hegel, tan real era la monarquía francesa del siglo XVIII como la Revolución que se gestaba en su seno.
El desarrollo de la economía mundial hacía imposible la perdurabilidad de la bipolaridad.
Era indispensable superar el mundo bipolar desde la izquierda.
Y como tal superación no se produjo en las dos últimas décadas del siglo XX, el cambio se impuso desde la derecha.
La subestimación de los valores subjetivos y de lo que se ha dado en llamar superestructura y su tratamiento anticultural se hallan en la médula de los graves errores cometidos.
Se pasa por alto que la cultura, en su acepción integral, está en el sistema nervioso de toda civilización.
No bastaba un programa económico social de beneficio para todos, era necesario que fuera acompañado de la exaltación de la moral como un elemento clave para la estabilidad de los sistemas sociales.
La gravedad de la situación es descrita de la siguiente manera por el Profesor de la Universidad de Harvard, Daniel Bell.
“El capitalismo norteamericano, como he tratado de demostrar, ha perdido su legitimidad tradicional, que se basaba en un sistema moral de recompensas enraizado en la santificación protestante del trabajo. Este ha sido sustituido por un hedonismo que promete el bienestar material y el lujo, pero se aparta de todas las implicaciones históricas de un “sistema sibarítico, con toda su permisividad social y su libertinismo”.
El tema, pues, de la economía y sus vínculos con la cultura, con sus implicaciones éticas, jurídicas y políticas, constituye un elemento clave para la estabilidad de los sistemas sociales y forma parte de los retos actuales que nos plantea la globalización.
La UNESCO ha afirmado que la cultura es el factor de mayores posibilidades de relaciones e influencia con los diversos factores de la sociedad.
No hay esfera que tenga mayores posibilidades de influir sobre el conjunto de ellas como la cultura.
La economía no está al margen de esta conclusión, por el contrario, la cultura tiene un peso especial en ella por su dinamismo y capacidad de movilización social.
En el tejido de las relaciones sociales que se establecen en los procesos económicos está presente la cultura y se enriquecen a partir de ella.
Está demostrado que el soporte subjetivo juega un enorme papel con su influencia sobre el medio que lo rodea y en particular sobre la economía.
Solo que ese factor no ha sido suficientemente estudiado, por una u otra razón, y quienes lo han hecho en alguna medida, ha sido desde la perspectiva de cómo extraer más zumo a ese componente de la producción que es la fuerza de trabajo.
Esto para explotarla más y distorsionar su inmenso y decisivo valor.
El papel de la cultura, entendido en su sentido más vasto y enriquecedor, que cubre, indudablemente, el campo del conocimiento, es basamento principal en la acción y reacción del hombre en su actividad económica social y política.
Las universidades más importantes del mundo han tenido que reconocer el hecho y por ello han introducido cada vez más en sus programas de estudio las actividades culturales y de recreación.
La economía tenía que pagar su tributo a lo cultural, lo objetivo tenía que ceder a lo subjetivo.
Y llegamos así a la situación que se vive hoy en las universidades e instituciones de educación superior mexicanas.
Así como el comercio internacional requiere de equivalencias de monedas para el tránsito de capitales, las equivalencias del capital humano se imponían.
En la visión capitalista actual el capital humano adquiere cada vez mayor importancia y también es parte del comercio y del tránsito de capitales.
Hoy día, el capital humano se ha convertido en el activo más importante de las empresas y estas requieren, en esta impuesta globalización, que haya un sistema de equivalencias en este capital humano, y uno de los factores de medición han sido lo que se denominan “Créditos académicos”.
Se firmó en 2007 un acuerdo nacional sobre créditos académicos que se le denominó SATCA , sistema de acreditación y transferencia de créditos académicos equivalente a los usados por las universidades de Estados Unidos y Europa, así como a las de organizaciones internacionales como las de las universidades de países de Asia y el Pacífico, con las que la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, ANUIES, tenían convenios de acreditación.
Todos los estudiantes mexicanos, para graduarse, tenían que cumplir las horas que comprendían los créditos académicos de actividades culturales, recreativas o deportivas, como 170 horas o más en cada carrera.
Eso significaba que si en 2007 un 15% de estudiantes participaban en esas actividades, ahora tendrían que participar el 100% si deseaban graduarse.
El caso es que dado que muchas instituciones reformaron sus programas de estudios y que dicha reprogramación dejo utilizables presupuestos suficientes para la contratación de los profesores que cubran en las actividades “subjetivas”, a muchas parece sorprenderles la necesidad de hacerlo, y en 2013 muy pocas están cumpliendo con los acuerdos.
Es imperativo que los elementos más capaces se aboquen a la tarea, pues además de la demanda creciente que las universidades tendrán de personal capacitado, en los otros niveles de la educación también aumentará la demanda de personal.
En todas las aéreas de cultura, recreación y deporte, por sufrir un gran rezago de atención se observa una inquietante pobreza, ya en la actualidad, por lo que esta demanda creciente de manera inusitada creará una crisis de calidad  peligrosa y se puede dar el caso en que la mayoría de nuestros niños y jóvenes sean servidos por personal improvisado y lo que pudiera ser una gran oportunidad para la sociedad se transforme en un daño grave para la misma.