11 ene 2011

Crónicas de Fontanka 4

Las facilidades de la internet en algunos, muy pocos, países; son casi nulas. Cuando uno está acostumbrado a utilizar cotidianamente la red y de repente pierde las posibilidades de comunicación y de obtención de información por esta via, se resiente mucho. Podemos hablar de que uno es internet adicto e internetdependiente. Con el desarrollo de la informática se creo una cultura cibérnetica realmente universal. Un sistema neurológico mundial, que desgraciadamente se caracteriza por una anestetización ideológica general. La globalización se presenta como abanderada de la universalidad de la cultura, lo que potencialmente es posible, pero las trasnacionales lo impiden porque son incapaces de conciliar la apertura universal con la identidad, con la soberanía y por lo tanto, con la diversidad.
Se está incrementando la exclusión y la dominación, debido a la conocida brecha digital provocada por la concentración del poder económico y del acceso sólo en las minorías. La comunicación, en sí misma, no constituye un progreso social. Y mucho menos estando controlada por las grandes firmas de multimedia, o cuando contribuye a ahondar la diferencia y las desigualdades entre ciudadanos de un mismo país y habitantes de un mismo planeta.
Con el asunto “wikileaks” estamos observando una reacción del país que suponemos “dueño” de la internet y del que a demasiado a menudo olvidamos el control que ejerce sobre nosotros con su manejo de la red. En el aparente libertinaje que puede decirse se goza en la red, caemos en una confianza desmedida que nos hace olvidar al gigante de botas de siete leguas cuya pisada puede alcanzarnos sin importar la distancia. En los países en que se sufre bloqueo económico, se agrega un bloqueo informático con la reducción de las facilidades de internet, ya que se les hace imposible limitar la creatividad de los pueblos. Ya desde la creación de la imprenta de tipos movibles, los dueños del poder que pretendían serlo también del conocimiento, han buscado como limitar la popularización de este, en un afán de mantener una supremacía que permita perpetuar su dominio.
El caso es que, por muy anestesiado que este uno, cuando se encuentra en alguno de los países que sufre limitaciones del uso de la red, se concientiza que hay todavía una dura lucha por delante para la liberalización de todos y cada uno de los medios de comunicación que debieran ser patrimonio de la humanidad y que a menudo olvidamos que no lo son.
Durante los meses anteriores he presenciado un creciente libertinaje en la internet, en que pareciera que todo se vale y que todo puede hacerse, pero esto es real solo en aspectos generales y digamos que en todos los banales, pero en los fundamentales todavía hay que dar batalla.
Se han ganado muchos frentes, como se hace evidente por los “wikileaks”, pero hay muchos por delante.
En lo que toca al ajedrez, la brecha digital se amplia a mayor velocidad cada vez, entre los países iberoamericanos y los primer mundistas. Si bien políticamente gobiernan la FIDE los “muchos y pequeños”, no necesariamente esto hja sido para bien, pues ha sido producto de unos talentos individuales no siempre sanos y que tengan la intención para utilizar el poder colateral que tienen para beneficiar a las mayorías, sino su preocupación responde a intereses personales y de grupo. Se crean así dos mundos paralelos del ajedrez diferenciados por el horizonte histórico real en que viven.
Pero quisiera llevar estas “riflexiones” al campo y a la temática para los que fue creado este blog y son la razón para que los lectores lo visiten: el estudio y la superación en ajedrez.
¿Es imprescindible para el desarrollo de un ajedrecista la informática en general y el internet en lo particular?
Creo firmemente que si. Botvinnik decía que la cultura universitaria, la formación que brinda el haber cursado en una institución de educación superior, era parte importante en el desarrollo integral del ajedrecista que pretendía destacar en los altos niveles competitivos en ajedrez. En la época en que expresó esta sentencia, sin duda estaba en lo cierto, aunque podía matizarse un poco, agregando que la cultura universitaria no sólo se adquiere matriculándose en una institución de educación superior, si no que es posible adquirirla de diversas maneras, además que la instrucción formal universitaria adolece de muchas irrelevancias y que hay muchas instituciones de educación superior que brindan tan mala preparación, que pueden dañar a muchos espíritus libres. Aunque no dejan de ser casos muy aislados, y por ello mismo, nada representativos de la situación, uno no deja de pensar en las hermanas Polgar, en Carlsen, Radjabov, Aronian, Karjakin y muchos otros que son preparados académicamente más en el sistema de coaching y de tutorías que en el académico “formal”. Pero la intención de las palabras de Botvinnik era resaltar lo importante que era que el ajedrecista se preocupara por mejorarse como persona en lo general continuamente y no sólo como jugador. Los modelos exitosos de grandes ajedrecistas que tenían un desarrollo inarmónico de su personalidad, desde el punto de vista instructivo son una propuesta negativa demasiado atractiva y que ha perjudicado a muchas “jóvenes promesas”.
Insisto en que el adquirir conocimientos de informática es muy importante para todo aquel que se dedique seriamente al ajedrez. Dentro de las diversas facetas de la informática, es muy importante el de saber acopiar la información y separar lo relevante y lo irrelevante en los grandes flujos de información, por ello la materia “webquest” es una asignatura importantísima en la curricula de un ajedrecista.
En los países en que la webquest no se puede practicar, como en el caso de Cuba, se aplican acciones compensatorias, pero no deja de ser un obstáculo que lo colocan en desventaja ante los demás. Si aun así el ajedrez cubano ha tenido muchos logros, estos serían mucho mayores si contarán con una facilidad que se les priva como consecuencia colateral del bloque económico que sufren por parte del país creador y dominador de la internet.
En décadas anteriores, el poder editorial ajedrecístico de un país era factor determinante para su supremacía, así paso en la Francia del siglo XVIII, en la Inglaterra del XIX y en Alemania y los Estados Unidos en la primera mitad del siglo XX y en la URSS en la segunda mitad. Actualmente los países que antes formaban parte de la Unión Soviética, son los que más presencia tienen en el pequeño mundo del ajedrez en la Internet, y en algo coopera este hecho para que mantengan supremacía en el ajedrez competitivo. En ese aspecto la India y China avanzan a pasos agigantados, tanto en la presencia ajedrecística en el internet como en la lucha por los liderazgos ajedrecísticos.
Lo importante en lo que toca a presencia del ajedrez internet no es tanto el número de sitios webs, sino de la cantidad de material “descargable” relevante que se puede obtener en ellos.
En un estudio superficial, conté más de 30 sitios en ruso interesantes ajedrecísticamente, con un promedio diario de 120 megas bajables de material relevante, contra 70 sitios en inglés interesantes con un promedio diario de 14 megas bajables de material relevante. Hay caso, como el de un sitio web costarricense que coloca muchos libros de ajedrez para bajar en PDF, que aporta unos 15 megas diarios bajables de material relevante, pero es material nada novedoso, consistente en libros publicados y desde ese punto, no es comparable con otro sitio ruso, que hace lo mismo, incluyendo el mismo material del sitio costarricense, ofreciendo casi 500 megas descargables de material relevante como promedio diario, con una mezcla de material novedoso, como puede ser el Chess Base Magazine mas reciente, como libros rusos en PDF, de los editados en la década de los 50s del siglo XX, o las colecciones “El ajedrez en la URSS” de los años 80s.
El caso es que si un jugador no sabe hacer la webquest es como un lector que tiene que comprar cada libro, y nunca accede a las bibliotecas pùblicas. O sea se limita al poder económico de su cartera y no aprovecha las ventajas que los enormes presupuestos gubernamentales invierten en bibliotecas.
Un padre de ajedrecista que no usa las facilidades de la internet, tendrá que invertir miles de dólares para obtener la misma cantidad y calidad de información que uno que realiza “webquest” y se gasta unas decenas de dólares al mes.
Diría yo, desde el punto de vista comercial, que si invierten en que los asesore yo unos 20 dólares al mes, obtendrán lo mismo que si gastan 200 dólares sin mi asesoría. Si no, a las pruebas.
El caso es que el punto no es que yo resalte lo importante que es mi asesoría sino lo fundamental e imprescindible que es la práctica de la informática para un ajedrecista. Por ello es una asignatura básica para todos.
Además de que al prepararse en informática, no sólo adquieren conocimientos y habilidades útiles para el ajedrez, sino para toda disciplina y arte humano. Si un niño tiene fuerte vocación por el ajedrez y por ella llega a aprender informática, será una cosa más que agradecer al ajedrez.