Seguir modelos exitosos es una recomendación general para toda actividad humana y práctica ya común en todos los que desean mejorar. Pero aun queda la cuestión de cómo elegir entre varios modelos que parecen igual de exitosos.
Ya los médicos nos orientan en que no hay enfermedades sino enfermos, que debemos, luego de generalizar, concretizar, ir de lo general a lo específico. A cada enfermo, conforme su enfermedad considerada en lo general, hay que darle un tratamiento específico. Puede ser que en un 90% sea igual al de otros pacientes, pero el 10% especial puede ser la clave.
¿Cómo elegir el modelo exitoso que sea mas adecuado para nosotros? Primer paso es conocerse a si mismo, y luego conocer bien los modelos exitosos para ver cual se acerca más a las características de nuestra personalidad como jugador, o a nuestras potencialidades.
El primer paso, que cumple la sentencia pitagórica, muchas veces es el más difícil de cumplir y nos lleva toda la vida. Si no se asume con la humildad que solo sabemos que nada sabemos, puede ser un paso imposible de dar.
A veces tememos conocernos a nosotros mismos. Como no somos ni ángeles ni bestias, como sentenciará la Biblia y escritores perspicaces como André Maurois, tenemos el temor de hallarnos con un monstruo que no pueda ser redimido. Pero ante todo hay que ser optimistas y esperar que tengamos mas cualidades que defectos y podamos alcanzar los sueños que nuestras ansias prometieron.
Como Marti dijo que con los pobres de la tierra quiero mi suerte echar, me gusta trabajar para los que no son evidentemente ricos en talento y buscar las maneras en que las personas comunes como yo podamos desplazar a los Titanes en un triunfo prometeíco que de el triunfo al hombre igual a todos.
Afrontemos con valor el autodiagnóstico sabiendo que solo la verdad nos hará libres y que tenemos que trabajar con lo que es nuestro. Nuestro vino de platano, es nuestro vino y si sale agrio es nuestro vino.
Lo curioso es que para guiarnos en como somos necesitamos también modelos que nos muestren que tipo de jugadores hay para así poder caracterizarnos. Como siempre, iremos de lo general a lo particular, pues los perfiles de modelos por necesidad son amplios, como los conceptos, que agrupan muchas nociones. Entonces los entrenadores en su devenir histórico trabajaron con dos grandes tipos de modelos y luego por cuatro, para luego llegar a las mezclas.
Primero se habló de jugadores posicionales y jugadores tácticos, pero esta clasificación era demasiado amplia y en cada uno de esos dos tipos había demasiados jugadores con características muy diferentes.
Luego siguió la propuesta de los cuatro tipos, más manejables. Aunque yo en mis cursos manejo prácticamente ocho para ejemplificar actitudes a asumir ante tipos de posición de acuerdo a una evaluación. Por ejemplo, si un jugador esta ligeramente superior, le sugiero asuma la actitud de Capablanca y siga una serie de pasos que constituyen lo que llamo, copiando a Shashin de San Petersburgo, el “algoritmo Capablanca”. Entonces, dependiendo de la evaluación de la posición que tenemos enfrente, podemos tomar ocho actitudes diferentes, siguiendo un modelo de jugador destacado y fácil de identificar como son Capablanca, Tal, Petrosian, Lasker, Alekhine, Botvinnik, Fischer y Karpov.
Pero pasemos a la clasificación más sencilla de cuatro tipos, que abarca las características básicas con las que se puede trabajar para el primer autodiagnóstico básico.
Los cuatro tipos se basan en el uso que usamos de la lógica o de la intuición. Dos tipos de jugadores, los Activistas y los Reflexivos, dan prioridad a la intuición, mientras que los Pragmaticos y los Teoristas a la Lógica. Si los caracterizamos de acuerdo a sus lemas, diríamos que los Activistas son “Prueba y Error”, los Reflexivos “Alternativas”, los Pragmáticos, “Lo que debe hacerse hay que hacerlo” y los Teoristas, “un modelo para cada cosa”.
Si queremos ponerles nombre y apellido a esos cuatro tipos generales de jugador, diríamos que “Activistas” son Tal, Anand, Shirov, Morozevich y Topalov. “Reflexivos”, Capablanca, Smyslov, Rubinstein, Petrosian, Karpov y Adams. “Pragmáticos”, Lasker, Alekhine, Euwe, Spassky, Fischer, Kasparov, Korchnoi y Svidler. “Teoristas”; Steintz, Tarrasch, Nimzovich, Botvinnik, Kramnik y Leko
Los Activistas dan importancia o prioridad a la intuición y los hechos, los Reflexivos a la intuición y a los conceptos generales.
Los Pragmáticos a la Lógica y los hechos, los Teoristas a la Lógica y a los conceptos generales.
El autodiagnósticarse , ya sea con ayuda o sin ayuda es no solo importante para trabajar en el mejoramiento de uno como jugador. La clave también es entender las diferencias entre uno y el oponente y aplicar esta comprensión conscientemente durante la preparación, entrenamiento y la partida de torneo.
Alekhine decía que había tres cosas claves para el éxito en ajedrez, Conocerse a si mismo, conocer a su oponente y jugar con un objetivo superior a meramente ganar la partida, o como digo en mis cursos, hacer jugadas ORO, jugadas que nos den Orgullo, Revisadas bien antes de hacerlas y Optimistas, pensando que podemos ganar. ORO.