En Rusia ha surgido
una discusión entre lo que pasa en el ajedrez a unos días del torneo de
Candidatos.
Y aunque a veces
parece que discuten sobre el sexo de los angeles, el gurú Sveshnikov, ruso
convertido ahora en Mago de Riga, disiente de lo expresado por el
vicepresidente de la FIDE y directivo de la Federación Rusa de Ajedrez que no
ve en la misma FIDE ni rumbo ni avances.
«Лучшее доказательство того, что страх смерти есть страх
не смерти, а ложной жизни, есть то, что часто люди убивают себя от страха
смерти»
Лев Николаевич Толстой
Alexander Koblentz, cuando se le hablaba de lo que se discutía
en algún lado, que parecían debates hueros, y como decía Machado, por fortuna
pasajeros, tenía una frase: “¿Qué afecta a los judíos de Riga?”
Parecen lejanas para nosotros, así como a los judíos de
Riga, lo que pasa en la FIDE, pero yo no dejo de acordarme del Gigante con
botas de Siete Leguas del que hablaba José Julián Martí Pérez, y en esta aldea
global, no hay nada realmente lejano.
Riga en 1850 tenía unos 650 judíos y para 1939 tenía más de
30 000, con todo y que Arón Niemzovich (apellido que significa hijo de alemán)
ya había emigrado a Dinamarca, para
luego solo quedasen, tras el nazismo, unos cuantos, entre ellos los
ajedrecistas, todos Magos de Riga, y
alumbraron al mundo del ajedrez como si fueran de nuevo miles. Y cada cosa que
pasó en la lejanía si afectaba a los judíos de Riga, como lo eran Tal y
Koblentz.
El creador de Mi Sistema, murió en 1935, pero sus dos
hermanos menores con todo y familia fueron víctimas del Holocausto entre 1940 y
1942, así que hay que cuidarse del Gigante aquel y no dejar de estar pendiente
de lo que se dice en debates aparentemente bizantinos. ¡Hay que estar alerta! Y
cuidarse si no hay algo podrido en Dinamarca como decía Hamlet. La FIDE es de
todos y si afecta a los judíos de Riga y a los otomíes del Estado de México…