El ajedrez en la Unión Soviética
estuvo durante 24 años fuera del ámbito de la FIDE, pues se identificaba a esa
Federación como una institución burguesa, que fomentaba un tipo de ajedrez
elitista, de competencia liberal, que alzaba la individualidad y que al mismo
tiempo parecía fomentar la división entre nacionalidades. El caso es que en
1924, cuando FIDE se fundó, la Unión Soviética no tenía mucho de haber podido
repeler la invasión de ejércitos de 6 países que trataban de ahogar el
comunismo en Todas las Rusias. Sólo menos de 7 años habían pasado. En 1925 se
realiza el Torneo Internacional de Moscú, pero no dentro de FIDE sino de una
asociación internacional de ajedrez de los trabajadores. El caso es que solo
tras la segunda guerra mundial y la repartición de esferas que los “aliados” en
Yalta hicieron para iniciar una guerra fría, los ajedrecistas soviéticos
participaron en eventos FIDE. Entre los primeros títulos mundiales que la URSS
ganó, estaba el de Boris Vasilievich Spassky, al titularse de Campeón Mundial
Juvenil en Bélgica en 1955, a los dieciocho años; y ese mismo año gana medalla
de oro en Francia en el Campeonato Mundial Estudiantil.
Spassky fue de los niños
evacuados de la ciudad de Leningrado (San Petersburgo se llama hoy, como cuando
fue fundada por el Zar Pedro el Grande), antes de que la sitiaran por 900 días
los nazis en la segunda guerra mundial. Así que era notable para cualquier
joven soviético lograr éxitos antes de la veintena de años, pues los problemas
de la guerra limitaban su desarrollo.
A los 12 años, allá por 1949,
tuvo sus primeros éxitos, pero la situación económica de su familia en la
posguerra era muy difícil y si no hubiera sido por el apoyo de su entrenador
Vladimir Zak, que veía por solucionar no nada más su capacitación técnica sino
su subsistencia material, ni siquiera un talento natural tan grande hubiese
podido florecer. En Leningrado había muchos jugadores igual de talentosos, como
Victor Korchnoi, que por ser un poco mayor que Boris Vasilievich no fue elegido
para ser evacuado y tuvo que sufrir la hambruna de ese sitio de 900 días que
aniquilo por hambre a tantos jóvenes pupilos del ajedrez de la ciudad. Los
entrenadores Model y Zak ayudaron a salvar a muchos, pero muchos otros,
potenciales grandes maestros fenecieron en ese infierno de hambre.
El caso es que Spassky ya para
los 16 años estaba a un nivel que en el siglo XXI correspondería al de un gran
maestro de 2700, pero entonces solo bastaba para ser maestro internacional.
Spassky era sin embargo, el más joven maestro internacional de la URSS en su
momento.
¿En que edad se debe alcanzar la
excelencia para poder aspirar a lo más alto?
Dicen que lo importante es llegar
y no llegar primero. En la URSS fue común que se graduaran de grandes maestros
y maestros internacionales a edad
madura. En primer lugar, entre los varones, influía el largo servicio militar,
la obligación de estudios a nivel universitario, todo eso hacía que grandes
talentos juveniles como Tal, Gipslis, Nikitin, Vasiukov, Alburt, Kapengut,
Shamkovich, Lein, Gulko y otros no llegasen a grandes maestros antes de los 20
años y fueron figuras grandes del ajedrez mundial.
Una vez hice una estadística y
llegué a la conclusión que en México había que ser seleccionado nacional, o sea
a nivel adultos, antes de los 20 años para poder ser de los mejores jugadores
del país, digamos estar en la primera decena. Si a los 20 años no habías
representado al país en algún evento internacional cerrado, es decir , solo
seleccionados nacionales, no torneos abiertos en que más de 10 jugadores de un
mismo país pueden participar, no podrías destacarte internacionalmente.
Hace 40 años, en la Olimpíada de Niza,
en junio de 1974 el equipo nacional tenía las siguientes edades: Mario Campos,
31 años, Benito Ramirez 32 años, Kenneth Frey 24 años, Jorge Lara 28 años,
Carlos Escondrillas 26 años y yo 21 años.
En agosto de 1971 el único equipo
mexicano que ha ganado un campeonato internacional por equipos, estaba formado
por Camarena, 49 años, la excepción, Alberto Campos Ruiz, 18 años, Escondrillas
23 años, Benito Ramírez 29 años y yo con 18 años.
En 1975, con15 años ganó el
campeonato nacional de ajedrez Marcel Sisniega.
Todos los mencionados, antes de
cumplir 16 años habían logrado estar en los primeros diez lugares en algún
campeonato nacional abierto. La estadística se hizo en base a resultados entre
1967 y 1997, 30 años de análisis.
Ahora bien, se dice que con la
informática, a partir de 1985, la edad que se consideraba antes que era de 16
años para destacar nacionalmente en los diversos países, debía reducirse al
menos 2 años.
En el caso de Spassky, ya uno de
los mejores de la URSS en 1955, se esperaba que para 1960 sería campeón
mundial, pero no fue así, porque paso un talento contemporáneo en su camino:
Mikhail Tal, solo dos meses mayor que Spassky y que de 1958 a 1960 hizo carrera
meteorica para ser campeón mundial. Hubo una partida en 1957 en el campeonato
de la URSS que definió el asunto y Spassky tuvo que esperar 6 años para ser
retador al campeonato mundial contra otro soviético que 8 años mayor que
Spassky había llegado a la cumbre
proveniente también de una generación que sufrió la posguerra.
Tanto a Spassky como a Tal, que
eran ya estrellas del ajedrez mundial al llegar la edad de servicio militar, no
les afectó esto, pero a Leonid Stein, Vasiukov y a muchos otros de esa edad, si
les retrasó para llegar a ser grandes maestros, lográndolos a unos tres o
cuatro años de más edad que a Spassky o a Tal.
Con las generaciones de jugadores
nacidos después de las guerras mundiales, el camino fue más rápido, como con
Karpov, que ya para los 18 años estaba peleando títulos mundiales juveniles,
sólo Spassky lo antecedió entre los soviéticos en eso. Lo mismo Vaganian,
Balashov, Beliavsky y por supuesto Kasparov. Esa generación antes de los 20
años de edad ya destacaban internacionalmente.
Curiosamente los jugadores
norteamericanos brillaban normalmente desde los 16 años, como Evans, Browne, Tarjan,
Peters, Christiansen, Matera y el mismo Fischer, todos de muy diferentes
generaciones, pero destacados como juveniles maestros, pero aunque llegaron mas
pronto a la cima, como que su desarrollo se cortaba mucho antes, mientras que
los soviéticos eran lentos pero de carrera más larga, evolucionando a edad
mayor. Por ejemplo Spassky logró uno de sus mayores éxitos, el super campeonato
de la URSS de 1973 a los 36 años y una final de candidatos a los 41 en 1978,
Tal una larga serie de éxitos entre 1972 y 1976 a esa misma edad, Korchnoi a
los 45 era retador al título mundial, Smylov llegó a la final de Candidatos
pasando los 60 años de edad. En cambio los jugadores occidentales estaban por
el retiro de competencias pasados los 45 años de edad.
Pero hablando de Spassky, como
mucho de él se sabe ampliamente, quisiera apuntar algunas cosas curiosas:
Nacido soviético, luego se
naturalizó francés, para finalmente tomar ahora la ciudadanía rusa. Dijo una
frase curiosa: “Si hubiera sabido lo que pasaría en Rusia al fin del comunismo,
en 1976 en lugar de exiliarme a Francia, me hubiera afiliado al Partido
Comunista de la Unión Soviética”.
Spassky se le recuerda más por
perder en 1972 el título mundial que los ajedrecistas soviéticos monopolizaron
desde 1948. Lasker sólo conservó más años su título, pero para los rusos era el
deporte nacional y les dolió tanto como el “maracanazo”· a los brasileños,
aunque no hubo tanto drama.
La derrota de Spassky ante Bobby Fischer le ganaron críticas de
todo tipo. los Botvínnik afirmó su extrañeza por los errores que había
cometido. La carrera anterior de Spassky parecía ser olvidada, y de un ícono
pasó a ser el modelo de todo lo que no hay que ser como deportista soviético.
Hasta a su hermana, excampeona de la URSS en el juego de Damas la amenazaron de
suspenderla como entrenadora en un liceo. Parecía que Spassky había emprendido
una caída cuesta abajo. La crisis de la organización del ajedrez en la URSS
planteo un reordenamiento y se buscaba
obligar a los maestros soviéticos a mantener la categoría y estudiar. Como dijo
Najdorf: “Spassky resurgió y superó ese duro “proceso”. Afloró su espíritu de
lucha y avanzó de nuevo en busca de otra oportunidad para recuperar el cetro. Empero,
tuvo que trabajar mucho para superar escollos. Para 1978 de nuevo estaba en una final del
Torneo de Candidatos, pero perdió ante Korchnoi. Najdorf en su columna presentó
la partida en que en 1948 Victor Lvovevich venció a Spassky en 12 jugadas en la
vieja Leningrado.