13 feb 2012

Uno no es tan listo



Muchos se preguntan porque a veces aprenden cosas mas complicadas que el ajedrez y en cambio no comprenden algunas cosas aparentemente simples cuando estudian ajedrez. La respuesta es que el cerebro tiene sus “bugs”, sus “bichos”, sus fallas y debemos conocernos a nosotros mismos para detectar nuestros bugs y así superarlos o compensarlos.
Por ejemplo ¿sabe usted los siguientes datos?
El Número de Dunbar - La gente evolucionó para vivir en bandas de aproximadamente 150 individuos, el cerebro no puede manejarse más que aquel número. Si usted tiene a más de 150 amigos en Facebook, seguramente no todos son verdaderos amigos.
Tendencia de visión retrospectiva - Cuando aprendemos algo nuevo, es muy común que nos digamos que ya  sabíamos todo eso.
Tendencia de confirmación - Nuestros cerebros se resisten a nuevas ideas, en cambio prestan la atención sólo a conclusiones que refuerzan nuestras nociones preconcebidas.

Lealtad a una marca - Buscamos la misma marca no porque confiamos en su calidad, sino porque queremos tranquilizarnos que hicimos una opción inteligente la vez anterior que la compramos.
La IDEA FALSA: Usted es un ser racional, lógico y ve el mundo como realmente es.
La VERDAD: Usted es tan engañado como el resto de nosotros, pero esto está bien, le mantiene sano.

A veces uno aplica buena lógica a las premisas falsas; otras veces uno aplica mala lógica a la verdad. Por ejemplo, si usted oye que Albert Einstein rechazó comer huevos revueltos, usted podría asumir que los huevos revueltos son probablemente malos para usted. A esto se le llama el argumento de autoridades. Usted asume que si alguien es superinteligente, entonces todo tipo de las decisiones de esa persona deben ser buenas, pero tal vez Einstein simplemente tenía un gusto peculiar.

Acabo de ver una película sobre las sugerencias de Botvinnik, excampeón mundial de ajedrez, para mejorar la economía mundial. Es interesante, pero se da uno cuenta de que Botvinnik, y muchos con él, presumía que si era bueno para el ajedrez, casi genio, lo era para todas las disciplinas humanas. La verdad estaba muy lejos de eso. Botvinnik era fuera de serie para el ajedrez, no para todo.

El que seamos buenos para el ajedrez o malos, no significa que seamos buenos o malos para todos. Nuestro cerebro puede tener un entrenamiento especial en un área, y no debemos sentirnos mal que en otra área pasemos trabajos, sino debemos conocernos para administrarnos mejor y así no frustrarnos porque en ajedrez no avanzamos tanto como en otras disciplinas. Debemos conocernos mejor para adaptarnos de manera adecuada para aprender ajedrez.