En un viejo debate explicaba
yo lo siguiente:
“Odio decir te lo dije, pero
te lo dije”. Cuando apareció el estupendo libro “Ajedrez para todos” editado
por el ISLA (Instituto Superior Latinoamericano de Ajedrez) hace unos seis
años, comenté a varios miembros del claustro de este Instituto que se había cometido
un error al publicar una foto de Reshevsky niño dando simultaneas como si fuera
la de José Raúl Capablanca y Graupera.
Primero quería hacer notar que la escena
era de los años 1920, como era evidente por la ropa del niño y de los jugadores,
y que si fuera Capablanca sería de finales del siglo XIX. Además nunca se había
escrito de que Capablanca como niño diera simultaneas a adultos. En la sociedad
cubana decimonónica eso era impensable, máxime que los potentados que mantenían
el club de ajedrez de La Habana se sentían muy conocedores del ajedrez y habían
patrocinado matches por el campeonato del mundo, además de haber, algunos de
ellos, jugado de igual a igual con muchos de los mejores jugadores europeos.
Las fotos mostraban personas muy abrigadas, no como del clima habanero.
Finalmente, el tipo de cráneo de Capablanca era muy diferente. Pero el
principal argumento que di es que las fotos de Reshevsky dando simultaneas por
los años de 1923 a 1926 habían aparecido numerosas en revistas como “American Chess
Bulletin” además de una famosa jugado con Edward Lasker por esa época y yo me
acordaba muy bien de ellas y la cara y el perfil eran fácilmente reconocibles
de Reshevsky.
Todavía durante el Torneo
Internacional “Carlos Torre in Memoriam” 2006, en Yucatán, México siendo yo
encargado del Boletín, le comenté al corresponsal y destacado columnista de
ajedrez cubano, Jesús Bayolo, que visitaba el país como parte de la delegación
cubana al torneo, mis observaciones,
pero las desecho argumentando que era asunto bien investigado en Cuba. La
verdad es que ya el debate estaba acalorándose, y supuse que no tendría caso
seguir discutiendo el asunto, máxime que también me expresó Bayolo que él mismo
fue de los primeros en publicar la foto.”
Asi escribí en http://www.inforchess.com/columnis/Ocampo/biblio42.htm
hace algunos años, pero sobre la foto que apareció en Cuba, resulta que surgió
otra desde otro angulo que no deja dudas,
Espero que ahora ya la controversia
esté más que aclarada y se acepte, incluso por Bayolo, que ambas fotos son de Reshevsky, al poder
examinar vestimenta y tipo físico de los oponentes que esta claro no son
caribeños y ya como sabemos que Capablanca no viajó fuera de Cuba a tan
temprana edad…