6 ene 2017

La Fórmula Bondarevsky para el éxito en ajedrez, base de Campeones Mundiales de Ajedrez. Parte 3





Una de las recomendaciones para mejorar en percepción táctica que daba Bondarevsky, me llamó la atención, pero al consultar a otros entrenadores, muchos opinan que la siguen. No la probado mucho, pero si le veo cierto sentido y en un tiempo, cuando era fácil trabajar con programas MS-DOS en las computadoras hacía algo muy similar en el Chess Quiz.
Veamos algunos comentarios más de Bondarevsky:
“Aprender los fundamentos del cálculo es algo simple, pero implementarlos es muy difícil. Trate de escribir su análisis de posiciones complicadas, y luego compare sus apuntes con las del auttor. Haga esto siempre sin mover las piezas. Si usted intenta esto en realidad, descubrirá al principio que es muy malo al calcular, y quizás se sienta desalentado.. Pero tal vez se diga ¡por lo menos lo hice! Pero con el tiempo lo hará mejor y mejor, y aprenderá muchos atajos de cálculo. Y lo que es más importante usted aprenderá cuales son sus defectos verdaderos y podrá concentrarse en ellos”.
“Mantenga una lista de sus errores, y verá que poco a poco, con el tiempo,  habra reducido el número de los errores que comete. Por ejemplo puede ser que detecta de que tiene problemas para calcular con exactitud cuando hay capturas por ambos bandos en partes diferentes del tablero, puede resolverlo concentré en ese tipos de posiciones hasta que sienta que los comprende totalmente”.
Bondarevsky recalcaba:  “Cuando el cálculo mental de la combinación demuesta que esta es correcta, uno debe, cuidadosamente, evaluar la posición final en cada variante, para determinar si son muy ventajosas primero, antes de jugar la jugada prevista. Si las posiciones resultantes no le satisfacen, por supuesto que intentar la combinación no tiene sentido”
Bondarevsky decía algo sobre las planilas que eran de 12 diagramas. Decia que había que usar dos para cada semana y trabajar seis días con ellas. Digamos la planilla A y la B. Un lunes tomar la A y anotar en una hoja aparte la solución, no usando más de 5 minutos para cada una. Tras la hora de entrenamiento revisar las soluciones, luego anotar que tantas se acertaron completas, si una variante se escapó, se da por mala. Luego seguía por la B al día siguiente y lo mismo. El tercer dia, volvíamos por la A, dedicando media hora nada más. Se anotaba y luego se comprobaba. Si se hacía de manera perfecta, usar una C, pero solo de seis posiciones, la mitad. Al cuarto día volvíamos a la B, por media hora. Se anotaba y se comprobaba. Luego se pasaba a la otra mitad de la C. Luego al quinto día volvíamos a la A, si había alguna falla en la segunda pasada, si no, pasábamos a la C completa, pero en media hora. El caso era repetir planillas hasta que se resolvieran perfectamente, dando unas tres oportunidades para ello. En la otra semana, seguíamos una D y una E, con F de reserva. Pero a la tercera repasábamos A, B y C.  Luego a la cuarta semana, pasábamos a D, E y F. El chiste era repetir hasta que de un golpe de vista resolviéramos todo. Tal vez a la quinta semana ya podemos ver A, B, C, D, E, F de a media hora cada una y repitiendo. A la sexta semana, usaríamos otras planillas.

Algunos maestros, como Ziatdinov recomiendan algo similar y agrega el GM de Taskent: “No tiene caso estudiar estrategia si no es buen táctico y resuelve posiciones tácticas en dos minutos cada una, treinta diarias.”
Por eso hasta otro Bucanero, el 2 de 2017, si se llega a dar,  veremos las fórmulas para superarse en ajedrez posicional de Bondarevsky.