29 jul 2011

Diversas opiniones de cómo mejorar.

En un artículo en un sitio web escrito por varios grandes maestros de las ex repúblicas de la URSS, dan los siguientes datos
129 mil jugadores en el mundo tienen rating, pero solo 20 000 han alguna vez alcanzado los 2200 de rating, 13500 han alcanzado 2250 y los afortunados que han logrado 2300 o más de rating, solo son 8150. Si se considera que hay como 25 millones de jugadores en torneos oficiales de federaciones, que 129 mil solamente hayan logrado clasificación de rating FIDE, ya significa en si que es un logro importante tener rating FIDE. Otro dato, solo unos 350 jugadores, de esos 25 millones, han logrado calificar como entrenador de la FIDE, lo que significa un 5% de los que han alcanzado 2300.
Interesante es como relatan algunos grandes maestros su camino al título:
GM Alexander Moiseenko:
Libros estudiados: “Partidas selectas” (Nezhmetdinov), “Trabajos Analíticos y Críticos”, 3 volumenes (Botvinnik), “Herencia Ajedrecística de Alekhine” (Kotov) – “Cuestiones de la Teoría Moderna de Ajedrez” (Lipnitsky).
 “Me parece que a fin de avanzar uno tiene que amar el ajedrez, y sería deseable pasar realmente el tiempo con un jugador de ajedrez más fuerte y analizar sus partidas. Me ayudó estudiar libros de ajedrez y tratar de encontrar errores, y cuando los encontré esto me pareció a una pequeña victoria.”

GM Ivan Morovic:
Tal vez existan “metodos”, pero puedo decir que directamente y a partir del principio yo ya era un verdadero fanático de ajedrez. Me acuerdo de leer docenas de libros de ajedrez en la edad entre 9  a 12 años, principalmente analizando las partidas  de los campeones mundiales, comenzando  con Morphy y Staunton y terminando con Fischer y  Karpov.  Me gusto mucho comparar las aperturas a partir del libro Zurich 1953 de Bronstein con libros modernos, encontrando así nuevas variants para usar en mis partidas.
Libros: “Mi Sistema” (Nimzowitsch), “Fischer vs. Spassky: El match del Siglo” (Gligoric), “Herencia Ajedrecística  de Alekhine” (Kotov).

Más adelante Korchnoi habla de sus avances:


“Aunque presumo de mis éxitos, lo cierto es que mi progresión fue bastante lenta.
Un inexplicable orgullo me impedía aceptar las ayudas que me ofrecían. Ya en 1950 me llegó, a través de intermediarios, una oferta de Alexander Tolush, considerado por entonces el ajedrecista más fuerte de la ciudad. "Dadme a Korchnoi y lo convertiré en Maestro': Mi respuesta fue: "yo mismo me convertiré en Maestro". Y lo hice, desde luego, y bastante rápido. Pero un par de años más tarde, Spassky comenzó a recibir clases de Tolush, y yo pude ver ante mis narices cómo progresaba. Entonces me di cuenta de cuánto había perdido por ser obstinado.”

Hay que mencionar que Spassky también dejo de estudiar con el GM Tolush por no soportar el duro carácter del coronel Tolush, héroe condecorado de la guerra. En 1953 ambos tuvieron grandes éxitos en el Torneo Internacional de Bucarest, pero Spassky lo sentía demasiado estricto con él. El caso es que dejar de estudiar con Tolush fue algo que menciona Spassky que lamentó muchos años.

Interesante las historias de los jugadores de Leningrado, hoy San Petersburgo. Esta ciudad tiene una particularidad por estos días del año,  entre el 11 de junio y el 11 de julio, el sol se sitúa a medianoche en el horizonte y alumbra durante las horas nocturnas. De hecho dura el día 24 horas, estas noches “blancas” las aprovecha todo el mundo y nadie duerme, en un fenómeno único en el mundo. Recorrer los puentes entre las diversas “islas” de San Petersburgo, como Fontanka,  caminando a la una de la madrugada es una muy rara experiencia que uno solo puede disfrutar en julio, como las pamplonadas…

Leer Biografías de grandes jugadores.

Para todo entrenador y también para cada jugador, es sumamente instructivo leer las biografías de grandes jugadores. He leído algunas opiniones del GM Yermolinsky sobre el entrenador Vladimir Zak y también los apuntes del GM Sosonko y las notas del afamado psicólogo Luria sobre las cualidades de Zak como coordinador de clases en Leningrado, hoy San Petersburgo. Pero los comentarios en la biografía del GM Korchnoi, donde menciona la relación de él y de Spassky con Zak, me parecen particularmente interesante y por ello transcribo un amplio fragmento:
“A finales de 1945 Vladimir Zak fue desmovilizado del Ejército y llegó para trabajar en la sección de ajedrez del Palacio de Pioneros.
Zak era un experimentado instructor con un sentido especia l para detectar talentoajedrecístico en niños que apenas sabían mover las piezas. Por eso tenía muchos alumnos, y entre ellos había unos pocos dotados de forma innata para el juego.
Él no se ocupaba de dar las clases a los niños, sino que invitaba a Grandes Maestros.
Recuerdo que algunas de las sesiones fueron de gran calidad, con Levenfish y Bondarevsky.
Zak estaba constantemente en contacto conmigo, ya que yo era uno de los más fuertes del club. Jugábamos partidas amistosas y compartía conmigo sus análisis. En los años 70 escribimos juntos un libro sobre el Gambito de Rey y realizamos una colaboración especial para el Informator Yugoslavo sobre Posiciones Típicas de la Variante Abierta de la Española.
Cuando comencé a practicar la autocrítica en el análisis de mi estilo de juego, estuve a punto de criticar a Zak, ya que él, desde su posición de entrenador, de profesor, no me había empujado en la dirección adecuada para trabajar en mi juego y reformarlo.
Pero me di cuenta de que no era culpa suya, sino que, desgraciadamente, no podía dar buenos consejos a un nivel de Gran Maestro.
Zak se preocupaba mucho por sus alumnos.
Descubrió a Spassky y le dio sus primeras lecciones. Al mismo tiempo descubrió que la familia de Spassky estaba al borde de la indigencia. Gracias a sus esfuerzos, a los 10 años Spassky comenzó a recibir una subvención del Estado como deportista destacado, y se convirtió en la persona que ganaba el pan para su familia.
Tengo que hablar de personas que están muy lejos en el tiempo, en ocasiones a más de medio siglo de distancia. Para Zak fue un duro golpe que sus alumnos favoritos, Spassky y Korchnoi, acabaran exiliados.
Hacia el final de su vida, a pesar de ser una persona importante, no había nadie que pudiera ayudarle. Murió en 1994 en medio de una extrema pobreza ...
A menudo los padres preguntan a qué edad deberían comenzar sus hijos a recibir entrenamiento intensivo en ajedrez.
Entonces recuerdo mis primeros años y les aconsejo y les ruego que no se precipiten.
El ajedrez puede apoderarse de un niño como una fiebre, y eclipsar el desarrollo de la tan necesaria educación general. Pronto perdí el hábito de la lectura diaria, y así, hay libros dirigidos específicamente a adultos que no he leído nunca: en concreto, las obras del escritor ruso más popular en Occidente ... Dostoevsky ...”

Por cierto que Korchnoi habla también del niño que delato a sus padres ante el Estado y lo llama Pavlik Morozov, en lugar del nombre que yo use, Ivan Morozevich. En relatos que hay en Internet utilizan el nombre de Pavlik Morozevich. Francamente no recuerdo el nombre y no vale la pena meterme a investigar, sino simplemente era mencionar el daño que una mala formación puede hacer a un joven.
Korchnoi escribe de manera muy crítica sobre su vida en la URSS, donde fue afectado en varias ocasiones a pesar de haber ganado varias veces el campeonato de la URSS. Incluso en ocasiones en que dicho evento era más fuerte que la mayoría de torneos internacionales, como fue el XXVII en 1960.
Por cierto que uno de los primeros libros que leí fue el del XXVII Campeonato Soviético que ganó Korchnoi, editado en España,  y en algunas partidas me parecieron inexplicables algunas jugadas en ciertas partidas. En sus memorias Korchnoi cita un par de ellas como parte de “farsas” en que un jugador le regaló el punto a otro… Después de algunos comentarios de Fischer desarrollé cierta aversión a analizar partidas de torneos entre pocos jugadores de “elite”, de 4 a 6 jugadores, que frecuentemente solo juegan entre ellos. No vaya a ser que muchas estén “arregladas” y uno se rompa la cabeza no entendiendo como se dan algunos errores…

27 jul 2011

Luria y los niños.

Entre los apuntes de Luria hay unas recomendaciones sobre la presión que se puede ejercer en un niño que compite en ajedrez del mal llamado “Alto Rendimiento”, que Luria describe como “Máximo Desempeño”; y advierte la necesidad de mantener un equilibrio entre la estricta disciplina y la actitud amorosa, entre el respeto por lo que puede llegar a ser un niño y la ternura por lo que es.  Advierte Luria que los manuales más importantes a desarrollar son los que permitan al padre enseñar a sus hijos ajedrez antes de enviarlos a estudiar con entrenadores profesionales.  En realidad contradice la tendencia generalizada en los años 30s en la URSS en que los niños eran separados de los padres para recibir la educación del hombre nuevo soviético. No por nada existían las estatuas a Ivan Morozevich, el niño pionero soviético que denunció los robos al estado de sus padres. El aberrante ejemplo de Ivan Morozevich. Luria propone en sus apuntes que el amor de padre debe tener la oportunidad de manifestarse enseñando al hijo a jugar ajedrez y que el padre debe ser consciente de que hay un momento en que el hijo debe tener otro mentor, si el padre ya no le puede enseñar a jugar. Recuerdo una plática con un ajedrecista, realmente con poco conocimiento del ajedrez técnico, aunque un experto en “trivia” ajedrecística, de aquellos que nunca estudiaron o entendieron una partida de Pablo Morphy, pero se saben la biografía completa. Le decía a este padre, que su hijo demostraba facilidad y vocación por el ajedrez y le recomendaba que lo enviara con un instructor de ajedrez. Me contestó ofendido “¡Yo soy instructor de ajedrez¡”, le contesté, un poco cruel, “Me refiero a uno de verdad”.  Con más suavidad traté de hacerle ver que ya el niño jugaba y sabía más que él, en técnica de ajedrez, no en conocimientos “culturales” de ajedrez.  Desgraciadamente, no suelo ser muy convincente cuando ando enfermo del estomago, pero al menos aceptó considerar la situación.  En otra ocasión me indignó ver  como uno regañaba a su hijo porque dejó una pieza colgando y lo amenazaba con no dejarlo ver televisión en una semana. Ese mismo padre, jugó luego en un torneo de blitz y me comentaba que en el torneo había dejado nada menos que tres piezas colgadas. “Te esperan tres semanas de no ver televisión” le comenté, me miró extrañado al principio, pero luego entendió porque lo decía.  “Creo que fui un poco duro con mi niño”, me comentó. Agregue entonces: “Sobre todo si tiene ocho años”. Luria da una serie de recomendaciones para los padres que merecen ser estudiadas, aunque se que no fueron seguidas en la URSS, pues entonces se trataba de hacer independientes a los niños de sus familias, pero ya por los años ochentas, luego de que Luria había muerto, si siento que fueron tomadas en serio por los programas de integración familiar que se hicieron en los últimos años de la URSS.

Casos increíbles. ¡Averígüelo Vargas!

Decían los economistas que tomando en cuenta todos los factores de geopolítica no se explicaba porque le iba tan mal a la Argentina en Economía y tan bien a Japón. Un entrenador de Moldavia, que ha estudiado mucho el ajedrez iberoamericano y que ha analizado lo que se gasta en dinero gubernamental en ajedrez en cada país me preguntaba: “¿Por qué le va tan mal a México en ajedrez y tan bien al Perú?” Me recordaba una pregunta similar que se hizo Felipe II sobre los virreinatos de Nueva España y Perú, aunque en sentido opuesto, pues las luchas entre españoles en el Perú duraron más décadas que en Nueva España. Se dice que de ahí viene la frase: “¡Averígüelo Vargas!”

Armenia, una vez más.

Con los constantes y repetidos triunfos del ajedrez armenio es de esperarse que los entrenadores de todo el mundo miren un poco hacia los modelos armenios de enseñanza del ajedrez. Curiosamente es un país donde ahora es obligatorio enseñar ajedrez en las escuelas, pero eso muy recientemente. Clubes escolares y de trabajadores  de ajedrez tienen funcionando más de 80 años en Armenia, pero en la era de la Unión Soviética no se destacaba especialmente de las demás repúblicas de la URSS, ya que en las Espartaquiadas de los Pueblos de la URSS su promedio de resultados era entre el quinto y sexto lugar, con algunos años, muy pocos, en que logró entrar a los tres primeros. Su líder moral era el excampeón mundial Tigran Vartanovich Petrosian, que aunque nacido en Georgia, era de familia armenia y prácticamente es el héroe nacional del ajedrez armenio. Otros nombres destacados eran Rafael Vaganian y los Kasparian, uno jugador y otro compositor de finales.  Pero tras la desaparición de la URSS surgieron muchos grandes jugadores y ahora hay una veintena de fuertes grandes maestros. El GM Arshak Petrosian ha sido pilar importante del desarrollo del ajedrez armenio postsoviético. Cuando vino a México hace unos treinta años, Arshak era el diputado más joven del Congreso Soviético y me imagino que tenía buenas influencias en el gobierno armenio después de la desaparición de la URSS.  La capital de Armenia, Erevan, presumía tener la mejor instalación de ajedrez aparte de Moscú de toda la URSS. Un excelente y gran edificio dedicado al ajedrez con academias, torneos y festivales realizándose continuamente. Ya para mediados de los años 90s del siglo XX, muchos de los que ahora suenan como los mejores jugadores, asistían a campeonatos juveniles y empezaban a ganar campeonatos mundiales de cadetes y juveniles, como Akopian, Aronian , Tigran L. Petrosian y Akobian. Muchos entrenadores se han trasladado a otros países y el ajedrez al estilo armenio va difundiéndose, aunque realmente poco se sabe de las facetas que distinguen a los métodos armenios de los otros de ex repúblicas de la URSS.  Es un ajedrez emotivo, táctico pero con gran técnica, como era el del joven Tigran Petrosian en los años 50s, pero antes de la influencia del GM Boleslavsky, que lo llevó a ser muy precavido.  El GM Alexei Suetin , quien fuera second de Petrosian mucho tiempo, acercado por Boleslavky, trató de describir el ajedrez de Petrosian pero no pudo definirlo con precisión, excepto por caracterizarlo como “ecléctico”. Arshak Petrosian, Mnatsakanian y Vaganian, que fueron formados en Erevan principalmente, como no fue el caso de Tigran Petrosian que estuvo influenciado por su primer maestro Ebralidze de Georgia, se destacaban por ser más agresivos que el campeón mundial, aunque siguieron su ejemplo en lo de sacrificar la calidad y fueron ávidos lectores del libro de Petrosian, que afortunadamente se tradujo al español. Desgraciadamente Tigran Vartanovich no fue prolífico como escritor, a pesar de figurar como redactor en jefe muchos años de la revista “64”, la mejor de la URSS y ahora del mundo. Ahora que no puede uno hablar de los ajedrecistas armenios sin hablar del medio armenio, por parte de madre, Garry Kasparov, que nacido Garry Weinstein, adoptó el apellido de la familia materna, Kasparov, que no es otra cosa que la versión rusa de Kasparian. Kasparov étnicamente y culturalmente es un armenio, aunque ajedrecísticamente fue iniciado en Baku, donde existía una nutrida población armenia, que luego fuese perseguida e intentada aniquilar en actos genocidas de los azeríes, en las locuras nacionalistas que aparecieron a la caída del poder soviético por todas las ex repúblicas de la URSS, que aunque no derivaron en luchas generalizadas como en las ex repúblicas de Yugoslavia, como las guerras en Bosnia y Croacia, si tuvieron un nivel de sangre muy similar en Baku.
El caso es que el modelo armenio de enseñanza del ajedrez tal vez llegue a popularizarse gracias a los notorios triunfos de esta república a nivel mundial.

Revisando aniversarios.

En 2011 se celebran muchos aniversarios, como los del primer hombre en el espacio, que antes de la “glasnot” era dado por seguro que fue Yuri Gagarin, aunque tras algunos documentos clasificados presentan a Illushin, el diseñador de aviones, como un posible primer cosmonauta, aunque no tan carismático como Gagarin y parece que tuvo un aterrizaje accidentado y su vuelo no fue tan bueno como el de Gagarin y prefirieron los soviéticos no contarlo como primer hombre en el espacio y así Illushin pasa a la historia como el gran creador de aviones y no como primer hombre en el espacio. Es difícil decirlo, porque el pasado de la URSS cambia todos los días conforme aparecen documentos “clasificados” que con la desaparición de la Unión Soviética dejaron de guardarse.
En 1931, hace 80 años, según unos de esos documentos que fueron escaneados en Uzbekistan y que de alguna manera pasaron a Internet , como el Wilkileaks, parece que el diseñador de los métodos de estudio que se aplicaban al ajedrez en la URSS no fue Vigotsky, sino otro personaje de la famosa Tríada de psicólogos soviéticos, Luria. Vigotsky, Luria y Leontiev tuvieron una influencia determinante en la manera de enseñar y estudiar en la URSS, y aunque en un principio recibieron buen apoyo gubernamental, poco a poco cayeron de la gracia de Stalin y en una corriente de antisemitismo, ya que los tres eran de origen judío, fueron poco a poco disminuídos en su poder. Incluso el líder, Lev Semionovich Vigotsky fue dado como muerto en 1934, de tuberculosis, pero aun eso esta hoy en duda. El caso es que muchos pensaban que Vigotsky marcaba las pautas de cómo enseñar y entrenar ajedrez en la URSS, claro que con apoyo de ajedrecistas profesionales como Rabinovich, Romanovsky, Riumin y Levenfish, pero situando las bases “psicológicas” de la enseñanza del ajedrez. Pero los mencionados documentos de Uzbekistan hacen ver que Luria era realmente el autor. Luria vivió hasta 1977, y tuvo grandes altibajos en su prestigio y reconocimiento como psicólogo. En lo que toca al ajedrez, solo unos cuantos entrenadores alguna vez lo mencionaron, con excepción de Makogonov, un gran maestro de gran influencia para la creación de la escuela de Baku, de donde eventualmente surgió Kasparov. Precisamente uno de los descendientes de Makogonov fue el que rescató los apuntes de Luria, que totalizan más de 1000 cuartillas y que, datados en 1931, parecen describir todo los métodos que se experimentaron en la enseñanza del ajedrez entre esa fecha de 1931 a 1992, cuando desaparece la URSS. Salvo en revistas como “Ajedrez en la URSS” de los años 1960 y 1961, poco se reconoce a Makogonov como fundamental en el sistema de enseñanza del ajedrez en la URSS y a Luria se le menciona sólo como miembro de la famosa tríada de Vigotsky, Leontiev y Luria, `pero no se menciona que era la base del sistema. Luria incluso llegó a estar desempleado poco antes de morir Stalin y solo logra trabajo colaborando con Boris Weinstein y Olga Tijomirova, dirigentes del ajedrez en la URSS. De hecho, según parece, la primera poseedora de los apuntes ahora difundidos fue Tijomirova, que durante cuatro décadas fue como la regidora del sistema de enseñanza de ajedrez de la URSS, aunque no hay en Occidente muchas referencias del enorme papel que jugó en el ajedrez de la URSS. Weinstein, por otra parte, fue colaborador y corrector de los textos del famoso libro de Bronstein sobre el torneo de candidatos de Zurich 1953 y autor de una biografía sobre Bronstein y reconocido como escritor. Asimismo mantuvo puestos importantes en el gobierno de la URSS durante los momentos más antisemitas del régimen de Stalin, a pesar de su notorio origen judío. El caso es que es fascinante leer los apuntes de Luria sobre la psicología en ajedrez y llama la atención que hayan pasado 80 años, desde 1931, para que se conocieran, y me temo que no por muchos.

Karlsbad y San Sebastian 1911.

Revisando las páginas del volumen de 1911 del British Chess Magazine, sobre todo los ejemplares de Julio. Agosto y Septiembre para curiosear lo que pasaba hace 100 años en el mundo del ajedrez, vi el anuncio de que había aparecido una nueva revista cubana denominada Crónica de Ajedrez, así como un libro por Janowsky sobre el Torneo de San Sebastian 1911 y el relato del paso por París del maestro Richard Teichmann, que había participado en España y sería luego el triunfador del torneo de Karlsbad de 1911, evento extremadamente fuerte. También hay relatos de torneos de ajedrez en Inglaterra para celebrar la coronación del Rey George V, así como relación de las giras de Capablanca por Hamburgo, Alemania.
Con ese poder que tienen los libros para trasladarnos por el tiempo, ya sea que los leamos impresos o en la computadora, viaje por aquellos eventos de hace 100 años, donde los torneos al participar maestros de diversas fuerzas eran más interesantes que los de cuatro o cinco grandes maestros de elite que juegan un torneo tras otro entre ellos y se conocen tanto que abundan las tablas. Esos eventos de “elite” tan aburridos van acabando con el atractivo del ajedrez.  En 1911 grandes maestros como Tarrasch, Schlechter, Capablanca y Rubinstein competían con jugadores de diversos niveles y a veces surgían partidas muy interesantes de los duelos desiguales. Obviamente algunos participantes en Karlsbad (hoy Karlovy Vary) como Suchting, Fahrni o Cohn, no eran de fuerza equiparable a Rubinstein, y otros como Alekhine eran muy jóvenes aún para escalar los primeros sitios, pero todos ellos eran campeones de sus países o regiones, y la mayoría pasarían a la historia. Llegaban a conseguir invitaciones a grandes torneos gracias a triunfos en torneos llamados “Superiores” y luego de ahí pasaban a los internacionales, pero eran eventos más o menos abiertos. Ahora , a pesar de que el número de fuertes maestros se ha centuplicado tras un siglo, los torneos se han vuelto muy elitistas. Si así hubieran sido en la primera cuarta parte del siglo XX, Carlos Torre nunca hubiera tenido oportunidad de enfrentarse a Capablanca, Alekhine y Lasker, pues estos, por ser de nivel de campeones mundiales solo jugarían con los de super elite, como Kramnik, Anand y Leko lo hacen ahora. Luego se sorprenden por tantas tablas. Fischer decía que esa política de hacer torneos pequeños con grandes jugadores y que se enfrentaban en un torneo tras otro sólo podría fermentar los arreglos de partidas o la proliferación de empates.
Cuando los actuales jugadores de “elite” se llegan a enfrentar con los grandes maestros “comunes”, a menudo son derrotados sorpresivamente como ahora le paso a la GM Judith Polgar con el veterano Seirawan en el Mundial por equipos 2011 o a Carlsen en la pasada Olimpíada de 2010 donde perdió más partidas en una semana que en todo el año.

22 jul 2011

Armenia, Rusia, Ucrania y Azerbaiyán en el Mundial.



Las escuelas de ajedrez de la extinta Unión Soviética se van imponiendo en el Mundial por Equipos. Azerbaiyán, que se consideraba antes como de los patitos feos en la URSS le pegó a Rusia y lo desbancó del liderato, cediéndolo a Armenia. Los azeríes están comandados por el otrora entrenador de Ucrania, el GM Vladimir Tukmakov, y los rusos fueron reforzados por la gran promesa del ajedrez Karjakin que antes jugaba por Ucrania. Es conocida la rivalidad entre azeríes y armenios, aun están las marcas del etnocidio de armenios en Azerbaiyán en los primeros meses de la desaparición de la URSS. Incluso el más famoso jugador de ajedrez del mundo, Garry Kasparov, nacido en Bakú, Azerbaiyán, pero de familia armenia, tuvo que fletar un avión para rescatar a sus familiares y evitar fueran aniquilados, teniendo que evacuarlos a Moscú, donde adoptaron la nacionalidad rusa. Kasparov es uno de los opositores al retorno seguro de Vladimir Putin a la presidencia rusa. En este mundial más del 30% de jugadores en otro tiempo hubieran viajado con pasaporte de la URSS. Esto de las nacionalidades parece una tragedia en estos tiempos, donde los migrantes parecen ser atacados en todas partes cuando en esta aldea global la migración no es excepción sino norma. En planos nacionales, incluso en México, observé que muchos de los entrenadores que lidereaban equipos de estados, eran originarios de diversos sitios. Los entrenadores de Yucatán eran del D.F. y de Cuba; el de Nuevo León, también capitalino, de Queretaro, mexiquenses, de Sonora, Habanero; de Campeche era de Villa Clara, Cuba; un guatemalteco entrenaba a los niños de la UNAM; vi un GM Peruano asesorando a niños hidalguenses; uno argentino a capitalinos, otro ecuatoriano, a niños morelenses, uno morelense a niños veracruzanos. La humanidad somos una familia, no cabe duda. El campeón mundial es de la India, pero vive en España y será retado por la otrora promesa bielorrusa, Gelfand que representa a Israel. El mejor entrenador alemán es Yusupov, lo que no extraña con la emigración tan grande que hace 20 años hubo de rusos a Alemania.
Hace unos días despedí a una gran amiga que regresa a Chechenia, donde en 1999 perdió a toda su familia y le preguntaba a que regresaba adonde nadie la esperaba y me dijo: “Mi patria es donde están mis muertos”.  Hoy que terminaba un estudio sobre Migración, mientras veía los reportes de cientos de migrantes en diversas fronteras que sufrían persecuciones y ataques, cuando la ola anti inmigrante crece en el norte y leía los lamentos de los comentaristas de ajedrez azeríes que festejaban su triunfo sobre Rusia, pero lamentaban que esto pudiera darles el campeonato mundial a los armenios, no dejaba de pensar en lo de la aldea global, pero una en que en cada choza queda algo de frontera, esas marcas imaginarias que hay que borrar en la Internet.

En el centenario de Marshall McLuhan

Con consternación los cuatro únicos alumnos que tengo en la India, residentes dos de ellos pero de nacionalidad española, uno mexicano, diplomático y uno totalmente de la India y que es uno de los más jóvenes prometedores y actualmente maestro FIDE a los 13 años, me comentan que uno de los sitios que utilizo para guardar archivos grandes en que les mando videos, Mediafire, ha sido bloqueado, junto con dieciocho sitios más, por el gobierno de la India.
Esto perjudica a miles de jugadores de la India que descargan en esos sitios infinidad de material ajedrecístico. Escriben emails de protesta, pero parece que no se espera éxito en la gestión, pues la medida va contra los que piratean filmes via internet y constituyen un mercado irregular que implica a más de dos millones de dólares a la semana.
Estamos en una aldea global, y lo que pasa en una parte del mundo nos afecta a todos. China ya había bloqueado un centenar de sitios internet, lo mismo que Irán, aunque por muy diferentes motivos. Algunos países o más bien, compañías trasnacionales de gran envergadura con sede principal en esos países hablan de dividir la internet, así como de otras medidas que solo enmascaran levemente el querer controlar la internet aún más de lo que ya lo hace el creador y dueño de ella, los Estados Unidos, que no ha hallado un camino seguro para que no se le salga de las manos.
Este paso que dio la India ha obligado a buscar “puentes” informáticos, disfrazando a usuarios de la India como si fueran de Indonesia, lo que ha funcionado unos días, pero que no es difícil de que los informáticos oficiales de la India encuentren alguna manera para evitar estas “fugas”.
El caso es que la información no se puede controlar, pero estos intentos de hacerlo contribuyen a mitificar la importancia de ella.   La información es poder, pero no todo el poder, ni siquiera la faceta más importante del poder.
La información digerida por nosotros es mucho más importante que la que simplemente nos llega.  Hay buena evidencia de que hay más posibilidades de recordar material que uno ha organizado y que se ha puesto en nuestras propias palabras, del que hemos tomado notas, que el material que trasladamos simplemente de un libro. Por eso en muchos casos aprendemos más en grupos de estudios y seminarios que leyendo un libro. En un curso de Andragogia (métodos de enseñanza a adultos),  que tome, nos mencionaban la frase: “¿Cómo saber lo que pienso antes de ver lo que yo digo? El decirlo con las propias palabras sirve para checar que uno entendió  y ayuda a identificar que trabajo aun se necesita por hacer.
El caso es que se acumula mucha información, alguna pasiva, que quedarán en forma de datos, otra semi pasiva, solo de consulta esporádica y otra activa, de consulta constante o que lleva el papel principal de un proyecto. Pero el limitar la internet disminuye al abanico que podría tener uno enfrente para hacer la separación de esos tres tipos de información.
Con lo de la India me vinieron a la mente el filme del Jorobado de Nuestra Señora de Disney y la biografía de William Taylend. En uno parecía la amenaza para el villano de que la imprenta pusiera conocimientos a nivel público y en la segunda el gran pecado de poner al Nuevo testamento traducido del latín al inglés en la era Tudor. ¿Cómo poner la información bíblica a la interpretación del pueblo común? Había que proteger a todos de su propia mala interpretación. En esa época un sacerdote de Zafra, en Extremadura, España,  que jugaba ajedrez se atrevió a citar clásicos griegos y latinos para ilustrar ideas de cómo jugar el noble juego; muchos de ellos casi prohibidos para la lectura de aquellos que no poseían título de bachiller. Se vuelve necesario estudiar la Exégesis para evitar que alguien haga interpretaciones equivocadas tanto de los doctores romanos como de los evangelistas.
El caso es que más se tardo el gobierno de la India en que ajedrecistas de varios países ideáramos una manera de evitar se pusiera la cerca informática.  Pero al mismo tiempo hay que ver como realizar el combate frontal, no solo planear la actividad clandestina, que tiene mucho de claudicación.
Una buena pregunta, que ayuda a conocerse, es la que le hicieron a Karpov y Kasparov. ¿Qué haría si su gobierno prohibiera el ajedrez? Karpov dijo que lo practicaría en la clandestinidad, Kasparov que trataría de derrocar al mal gobierno. Muchos somos eclécticos y haríamos las dos cosas. Pero el golpe debiera ser bien planeado, pues el ajedrez enseña que ataque que no aniquila fortalece.